La nueva temporada de Una calle, mil caminos llega con nueve telefilmes inéditos que abordan, sin tabúes, los desafíos, sueños y emociones de la adolescencia cubana
Cada verano, Una calle, mil caminos vuelve a la pantalla televisiva para dialogar con la juventud cubana y su familia con historias que no solo entretienen, sino que también educan, provocan reflexión y ofrecen alternativas ante los desafíos del crecimiento.
Este 2025, el programa regresa con nueve telefilmes inéditos, una cifra que confirma el compromiso de su equipo creativo con una televisión que forma, acompaña y propone soluciones. Para conocer en detalle esta nueva temporada, JR conversó con dos de sus asesores clave: Beatriz Roussó y Dely Fernández.
Nuevas temáticas para una realidad cambiante
—Beatriz, ¿qué temas centrales abordan los telefilmes de esta temporada y por qué son relevantes para adolescentes y jóvenes?
—Esta temporada trae temas diversos y actuales que dialogan con la realidad de nuestro público. Por ejemplo, la perseverancia y la voluntad se exploran en Contra viento y marea; el embarazo en la adolescencia, un asunto prioritario, en Después del abrazo; la lucha por los sueños a pesar de los obstáculos, en Raíz; además, la timidez y los complejos, y el miedo al fracaso en Había una vez más. (JR)
